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Sorprendente crecimiento en ventas departamentales

Por: Alan de Anda

El 2025, en términos generales, ha sido un año de debilidad en el consumo de los hogares mexicanos, en línea con la fuerte desaceleración de las manufacturas y la caída de las remesas.


El headline del consumo en México, el Indicador Mensual de Consumo Privado (IMCP), estimado por el INEGI, presenta una caída de 0.4% respecto al 2024 para el periodo enero-julio. A su interior, los rubros nacional y de importación presentaron un avance de 0.5% y una caída de 3.7%, respectivamente.


A contrapelo de lo antes señalado, la Encuesta Nacional al Consumidor, elaborada también por el INEGI, muestra un comportamiento positivo, destacando especialmente su componente de compras de muebles y electrodomésticos (ver grafico), el cual se sitúa cerca de máximos históricos.


Asimismo, es de sorprender la dinámica del componente departamental en el indicador de ventas de la Asociación Nacional de Tiendas de Autoservicio (ANTAD) integrado por cadenas como Coppel, Liverpool, Palacio de Hierro, Sears, Suburbia, Woolworth, etc. denota una notable reactivación a partir de mayo (ver gráfico), creciendo por encima del 15% en su última lectura de agosto.


Cabe mencionar que dicho repunte en ventas no obedece a un incremento en precios, pues el índice de precios de muebles y electrodomésticos se mantiene relativamente bajo creciendo en torno al 1.9% anual.


¿Qué está pasando con los patrones de consumo en México? Si recordamos la caída en las ventas de autos nuevos durante el presente año y en vista de las dinámicas descritas anteriormente, los hogares mexicanos parecen estar trasladando su gasto hacia otros bienes durables tales como muebles, electrodomésticos y enseres.


Sin embargo, la gran prueba para el consumo será la dinámica del empleo, sobre todo considerando que también el crédito al consumo pierde ritmo en el 2025.