Apoyo a adultos mayores
Jaime Santoyo Castro
Los adultos mayores se encuentran entre la población más vulnerable y con frecuencia son afectadas por situaciones discriminatorias al intentar incorporarese o reincorporarse al mercado laboral; por ello, en el artículo 186, de la Ley del Impuesto sobre la Renta, se establece el otorgamiento de estímulos fiscales a los patrones que contraten adultos mayores, consistente en deducir de sus ingresos acumulables para los efectos del impuesto sobre la renta del ejercicio fiscal correspondiente, el equivalente al 25% del salario efectivamente pagado a las personas de 65 años y más, determinación legal que es incompleta, porque deja al grupo de entre 60 y 65 años desprotegido, olvidando que la OMS, considera a toda persona mayor de 60 años como de la tercera edad.
Es indiscutible que la tercera edad llega con una disminución de las facultades físicas y sensoriales, que impiden la participación plena y efectiva en igualdad de circunstancias con los demás.
La Diputada Federal Martha Elisa González Estrada, del grupo de Acción Nacional, presentó hace unos días una iniciativa de reforma a este precepto legal, a fin de considerar el estímulo fiscal señalado a quienes contraten a personas que tengan 60 años o más, lo que me parece muy adecuado, pues incorpora a un grupo de edad que está siendo discriminado por la disposicion legal.
En su iniciativa, la Legisladora hace consideraciones muy interesantes que exponen la dificil realidad del grupo de la tercera edad, haciendo mención de que uno de sus problemas más importantes, además de las discapacidades secundarias a enfermedades crónicas, son los estereotipos que la misma sociedad ha impuesto sobre ellos, pues con frecuencia se les ve como una carga, dependientes y débiles, olvidando su contribución a la familia y a la sociedad; pero además hace un análisis muy serio y preocupante al exponer que la cifra de adultos mayores mexicanos registrará un aumento constante, pues de los 6.7 millones de adultos mayores registrados en 2000, pasará a ser de 36.5 millones en 2050, de tal suerte que debemos ir adecuando las políticas públicas y las disoposiciones legales para atender a estas circunstancias.
Por lo pronto, ojalá y se apruebe esta iniciativa, y se considere este estímulo tambien en las leyes del IMSS e INFONAVIT.