Este lunes, Morena y sus aliados consolidaron el control de los tres poderes de la Unión: Ejecutivo, Legislativo y Judicial. Cabe destacar que, es la primera vez en tres décadas, pues antes los cargos se alternaban y existía una contraposición política para evitar la concentración del poder en un solo partido.

El Ejecutivo está encabezado por Claudia Sheinbaum; el Congreso, bajo la conducción de Sergio Gutiérrez y la senadora Laura Itzel Castillo, ambos de Morena; y la Suprema Corte de Justicia de la Nación, ahora dirigida por Hugo Aguilar, exfuncionario de la administración de Andrés Manuel López Obrador.

En el Senado se tomó protesta a las nuevas ministras y ministros de la Corte, así como a 869 juzgadores federales electos.

Durante la conferencia matutina, Sheinbaum defendió la reforma al Poder Judicial, calificándola como una de las más importantes. Agregó: “La Cuarta Transformación no sólo continúa, sino que se profundiza. Se termina la era del nepotismo, corrupción y privilegios, y comienza una nueva era de legalidad y justicia para todas y todos”.

Por su parte, Ricardo Anaya expresó que dicho proceso carece de legitimidad. Señaló cuatro puntos principales: la creación de una mayoría artificial con base en órdenes de aprehensión, la integración de comités de evaluación a modo, la implementación de una tómbola con selección previa y la baja participación en la elección.