El presidente de México, Andrés Manuel López Obrador, se pronunció en relación a la controversia generada tras el chiste que hizo durante su conferencia matutina en relación al caso de los cinco jóvenes desaparecidos en Jalisco. El mandatario aseguró que no se burló de la situación y acusó a sus adversarios y la prensa de malinterpretar sus palabras.

López Obrador afirmó que el chiste surgió a raíz de la confusión generada por los gritos de los reporteros al final de la conferencia, los cuales no pudo escuchar debido al ruido. Enfatizó que la prensa malintencionada utilizó esta situación para difamarlo y acusarlo de burlarse de los jóvenes secuestrados en los Altos de Jalisco.

En respuesta a las acusaciones, el presidente apuntó a los «corruptos de siempre» como responsables de calumniarlo, mencionando indirectamente a la senadora Xóchitl Galvez, a quien se refirió como «una aspirante presidencial». Mostrando el video de su conferencia, López Obrador demostró que no escuchó la pregunta sobre el caso de los jóvenes desaparecidos, lo que desencadenó la reacción que provocó el chiste.

El presidente reiteró que su administración está tomando el caso de los jóvenes desaparecidos en serio y está colaborando con la Fiscalía de Jalisco en la investigación. Informó que un grupo de especialistas está trabajando para esclarecer el caso y determinar la verdad detrás de la desaparición de los jóvenes. Además, mencionó que la Fiscalía General de la República (FGR) está evaluando la posibilidad de atraer el caso.

López Obrador concluyó su declaración subrayando su compromiso en resolver este asunto y expresó su rechazo a la manipulación mediática que ha rodeado el tema. La controversia en torno a su reacción ante la tragedia de los jóvenes desaparecidos sigue siendo objeto de análisis y debate en la opinión pública mexicana.