Advirtió que es difícil de detectar pues el fentanilo es una droga sin olor y sin sabor

Pedro Rodríguez de la Torre, presidente del Centro de Integración Juvenil (CIJ), explicó que aunque a nivel nacional se afirma que los consumidores de metanfetaminas inician entre los 18 y los 25 años, «existe un período ciego en el que los niños de hasta cinco años pueden consumir drogas sin ser detectados».

Además, advirtió que en el caso del fentanilo es más difícil detectar a los consumidores, ya que es una droga sin olor ni sabor y se mezcla con otras drogas como la cocaína y el cristal, lo que hace que pase desapercibida.

Esto dificulta la identificación del momento en que empiezan a consumirla, «y a menudo no se busca ayuda hasta que los propios consumidores o sus familias empiezan a notar síntomas de consumo, que pueden aparecer a los tres o cinco años».

Por lo tanto, es crucial que las familias presten especial atención a los síntomas que puedan indicar un posible consumo de metanfetaminas, que se conocen bajo diversos nombres como speed, meth, chalk, hielo o cristal.

A esto se suman los diversos métodos de consumo; los más comunes son la inhalación, la inyección, las gotas para los ojos o la colocación de la droga en un dulce, «aunque los más frecuentes son los métodos de inyección y oral».

Desde 2017 se ha detectado otro método de consumo en el que la droga se coloca en un papel y se ingiere.

Rodríguez de la Torre también mencionó que en la actualidad el CIJ participa en programas de prevención del consumo de drogas y atiende a unos 600 jóvenes, no solo a aquellos con problemas de adicción.

Recordó que brindan atención a casos de violencia familiar y problemas psicológicos, aunque la mayoría de ellos están relacionados con el consumo de sustancias ilícitas