Navegar / buscar

¿POR QUÉ EVALUARSE A LOS 100 DÍAS?

Jaime Santoyo Castro

AMLO, como lo hicieron otros Presidentes de México, hizo un recuento de los primeros cien días de sus gobierno, y eso nos motiva a hacernos la pregunta: ¿Por qué evaluarse en los primeros cien días?

Las disposiciones legales mexicanas no establecen ningún mandato que obligue al Presidente, a rendir cuentas los primeros cien días; luego entonces ¿por qué lo hacen? ¿De dónde surge esa costumbre?.

El primer mandatario que realizó esta medición de los primeros cien días fue Franklin D. Roosevelt, en 1933, quien al asumir el cargo presentó su famoso programa de política intervencionista denominado “New Deal”, para luchar contra los efectos de la gran depresión en su país con la famosa frase “A lo único que debemos temer es al miedo mismo”. Es decir; Roosevelt planteó un programa emergente centrado en la economía, y a los 100 días le explicó a la población los avances, como una estrategia de comunicación, para sembrar la percepción de éxito.

Construir una percepción social de éxito. Ese es el motivo del informe de cien días. ¡¡Pero cuidado!!; si no se construye con medidas reales, es decir, si sólo se crea la apariencia de éxito, como se ha hecho en el pasado, la decepción social es muy reactiva.

De Roosevelt en adelante, en diversas partes del mundo, particularmente en México, se ha seguido esa estrategia para convencer a la población de que acertó en la elección; aunque realmente cien días es un plazo muy corto para dar respuesta a los retos de gobernar, que van desde armar un equipo, realizar reformas legales y económicas, establecer un plan de gobierno y tomar medidas contundentes que den la idea de eficiencia durante todo el mandato, es realmente difícil.

Salinas, Fox, Calderón y Peña Nieto, iniciaron con anuncios y medidas espectaculares creando expectativas que se fueron diluyendo con el paso de los días, como muestra plena de que en política la confianza no se gana de una vez y para siempre, sino que debe irse ganando todos los días.

Más allá de anuncios y medidas espectaculares, México requiere un cambio profundo en la economía y en la política para eliminar la pobreza extrema, generar mejores condiciones de vida, con seguridad, paz y armonía. ¡¡Esperemos un tiempo para ver si vamos en el rumbo deseado!!