En el mes de agosto, la inflación general en México mantuvo su tendencia descendente al ubicarse en un nivel de 4.64 por ciento, según datos proporcionados por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía (Inegi). Este marcó el séptimo mes consecutivo de disminución de la inflación y representa el nivel más bajo desde febrero de 2021, cuando el indicador se situó en un 3.76 por ciento.

La reducción de la inflación en agosto se debió principalmente a menores costos en los energéticos, incluyendo electricidad, gasolinas y gas LP, que fueron un 5.99 por ciento más bajos en comparación con agosto de 2022. Además, se registró una disminución en el precio de algunas frutas y verduras, como la naranja, uva, papa, aguacate, chayote y ejotes, entre otros.

Esta disminución en los precios fue particularmente notable en los estados de Nuevo León, Guerrero, Baja California Sur, San Luis Potosí y Baja California, según el Inegi.

Ramsé Gutiérrez, vicepresidente y codirector de Inversiones en Franklin Templeton, señaló que aunque la inflación ha disminuido debido a la reducción de otras presiones inflacionarias a nivel global, «la batalla» continúa en el componente subyacente. En agosto, este índice se ubicó en un 6.08 por ciento, y se espera que se mantenga por encima del cinco por ciento durante el resto de 2023 y alcance un cuatro por ciento en el próximo año.

Gutiérrez también señaló que este componente subyacente será un desafío para el Banco de México a medida que considera la posibilidad de reducir las tasas de interés durante este año y el próximo.

Los especialistas consultados por Citibanamex prevén que la inflación cierre en un nivel del 4.70 por ciento para finales de 2023 y alcance un cuatro por ciento en el año siguiente.