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Incertidumbre y desaliento

Irene Escobedo López

Nada ha cambiado para quienes aún se consideran trabajadores de confianza del Gobierno del Estado. La mayoría servidores públicos de mandos medios hacia arriba, jefes de departamentos, directores, a quienes se les garantizo en la administración Tello, un contrato con vigencia al mes de diciembre del 2021.

Para el Gobierno de David Monreal, no hay nada que negociar, no hay recursos para el pago de los salarios de funcionarios de éste nivel y tampoco intenciones de beneficiar a nadie que traiga las siglas del tricolor.

Los funcionarios, empeñados en continuar siendo beneficiados por el gobierno, recontratados, o por lo menos pagados en sus salarios, no verán cristalizar sus anhelos. No habrá para el pavo en navidad. La Dirección Jurídica giro una serie de oficios donde se les prohíbe ingresar a las oficinas donde ‘prestan sus servicios’.

En su fragilidad, los servidores públicos han buscado un hombro para llorar en las bases que integran los trabajadores al servicio del estado y han sostenido reuniones con algunos líderes y directivos, tratando de encontrar una salida que los ilumine y les permita por lo menos llegar a las posadas, como trabajadores al servicio del estado. Lo único que han encontrado es apoyo moral, del resto solo lograron incertidumbre y desaliento.