CIUDAD DE MÉXICO (CNNMéxico) — El dictamen de la polémica reforma energética, la cual ha polarizado al Congreso, por fin llegó al pleno del Senado, el cual dispensó la primera lectura y citó a una nueva sesión a las 14:30 horas.

Se prevé que este mismo martes se lleve a cabo el debate y se someta a votación, dijo el senador David Penchyna, presidente de la Comisión de Energía de la Cámara alta y militante del gobernante Partido Revolucionario Institucional (PRI).

«(Se dará) primera y segunda lectura», señaló ante medios. «Tenemos la responsabilidad de tomar decisiones».

Para el priista, es «evidente» que los partidos de izquierda tratarán de usar «tácticas dilatorias» para retrasar la discusión, pero confió en que el tema avanzará y el documento será enviado a la Cámara de Diputados.

«Van a tratar de detener lo que no se puede detener con argumentos», dijo.

Minutos después, la bancada del Partido de la Revolución Democrática (PRD), principal opositor a la reforma, acusó al PRI y al Partido Acción Nacional (PAN) de hacer un manejo «arbitrario» del debate en comisiones para acelerar el tema.

Durante la madrugada del martes, tras un empate en una votación, el PRI y el PAN promovieron un acuerdo para que el dictamen avanzara al pleno avalado únicamente en lo general, para que todas las reservas se revisen en el pleno.

Dolores Padierna, vicecoordinadora de la bancada, insistió en que la izquierda rechaza la reforma porque es «altamente privatizadora» al plantear la apertura del sector energético a la inversión privada nacional y extranjera.

En la misma rueda de prensa, el perredista Armando Ríos Piter advirtió que la discusión será larga.

«Nos vamos a reservar, todos los senadores y senadoras, todos los artículos», dijo. «Estamos dispuestos a dar todo el debate que sea necesario».

El perredista Alejandro Encinas, además, afirmó que la reforma provocará despidos de trabajadores petroleros debido a la entrada de particulares al sector.

«Los trabajadores van a ser despedidos, de eso no hay duda», dijo.