Irene Escobedo López

El gobierno tiene que aceptar su responsabilidad en los hechos trágicos suscitados en el centro de detención de inmigrantes de la frontera norte del país.

No solo la empresa de seguridad privada tiene responsabilidad en estos hechos alguien más no está haciendo su trabajo y tanta responsabilidad tiene el gobierno como la empresa que omitió el Socorro.

Se habla de que la empresa de seguridad privada ni siquiera se tomó la molestia de actualizar y reportar a Gobernación el número de elementos que mantenía como operativos en las oficinas la inmigración de todo el país.

En la base de datos solo existen 10 nombres registrados cuando hay más de 500 elementos con uniforme y arma y que el gobierno pasó por alto que le correspondía normar. La falta es necesariamente de funcionarios públicos, el gobierno es el ente que vigila la correcta aplicación de la Norma para que empresas patito no lleguen a hacer funciones policiacas con las consecuencias que ya vimos.

Le guste o no ya López Obrador se llevará como insignias -tal cual sucedió con el gobierno pasado en el caso Ayotzinapa- la muerte de 40 migrantes y la irresponsabilidad de un montón de funcionarios a quien nadie supervisó porque todo lo quiere hacer el presidente y por supuesto que no tiene ni ojos para todos ni manos que le alcancen aunque eso sí ya se las lavó como Pilatos