El presidente de la Unión Nacional de Empresarios de Farmacias (Unefarm), Juvenal Becerra, ha hecho una preocupante denuncia sobre el crecimiento de la presencia de medicamentos «piratas» en el mercado debido al desabasto de medicamentos en el sector público y los efectos de la pandemia de Covid-19.

Según Becerra, antes de la pandemia, aproximadamente el 5% al 6% del monto global de medicamentos se falsificaba, pero al primer trimestre del 2023, esa cifra ha aumentado al 8%, generando impactos económicos estimados en 30 mil millones de pesos.

El desabasto de medicamentos tanto en instituciones públicas como privadas ha creado un espacio para que empresas o bandas incrementen la clonación de productos médicos, aprovechando la necesidad y la demanda de tratamientos. Debido a su precio, tratamientos prolongados o ser productos de alta especialidad, una amplia gama de fármacos se venden ahora en el mercado negro por menos de la mitad de su precio real.

El presidente de Unefarm señaló que los medicamentos «piratas» se encuentran fácilmente en mercados ambulantes, páginas ilegales de internet y redes sociales como Facebook e Instagram, donde se ofrecen a precios considerablemente más bajos que en el mercado regulado.

Juvenal Becerra también mencionó que se han identificado casos de medicamentos clonados ingresando al país desde la frontera sur con Guatemala, lo cual no se había registrado antes.

Por su parte, el director general del Instituto Farmacéutico (Inefam), Enrique Martínez, advirtió que el desabasto de medicamentos por parte del sector público ha aumentado la carencia de medicinas, estimando un desabasto del 30%.

Para combatir el problema, las empresas farmacéuticas buscan que un mayor número de medicamentos estén disponibles en versión genérica y patentada, lo que ofrece a los consumidores una alternativa más económica y accesible. Actualmente, aproximadamente el 80% de los productos en el mercado tienen una versión genérica, lo que brinda más oportunidades para encontrar medicamentos a precios más bajos.

La venta y distribución de medicamentos «piratas» representa un riesgo para la salud pública, y las autoridades y la industria farmacéutica deberán unir esfuerzos para abordar este creciente problema y garantizar que los ciudadanos tengan acceso a medicamentos seguros y de calidad.