La pasión 4×4 tuvo su explosión en Jerez hace aproximadamente 10 años, pero tiene un comienzo más antiguo

 En el marco de las actividades propuestas por el comité de feria y el ayuntamiento para la presente edición de la Feria de Primavera  se llevó a cabo la competencia de vehículos 4×4, en su modalidad crawling, con una pista extrema con diferentes obstáculos en la entrada al rancho de Los Ríos, donde concursantes locales y foráneos midieron la potencia de sus camionetas, así como su habilidad de conducción.

Con una tradición de más de 15 años, que comenzó el club Malibú, el crawling es parte de las actividades de los 4×4, que ahora comparten varios clubs locales, como Carroñeros y Toyoteros, entre otros. Respondieron al llamado participantes locales y foráneos que pusieron a prueba las capacidades de sus 4×4 en una pista ovalada con fosas de lodo, un tramo de lavadero, una curva peraltada, hoyos, montículos de tierra, llantas y troncos de considerable tamaño, donde el ganador es aquel que logre concluir el recorrido en menor tiempo.

La modalidad del crawling, que lleva realizándose 6 años en nuestro municipio, en la presente edición, tuvo como primer lugar a Sapy Castillo, de los Chamucos de Fresnillo, con una camioneta Toyota modificada de color verde soldado, con un tiempo de 4:40 minutos. Lo que se pretendía en este evento era que las familias tanto del municipio, así como del estado pasaran una tarde agradable contando con un circuito para lucir sus habilidades de conducción y las modificaciones hechas a sus camionetas, por ello, varias familias, incluidos los más pequeños, llevaron los implementos para hacer carne asada y disfrutar de las pistas, tanto en carros, como en camionetas y motos.

El ambiente de la escena 4×4 es netamente familiar, aquí, conviven las esposas probando sus habilidades al volante dentro de la pista, pues se podía hacer uso de ella sin estar inscrito en la competencia, los más pequeños corriendo y jugando entre los montículos de tierra y obstáculos, así como los adultos mayores, disfrutando del espectáculo, “por eso nos gusta, nadie se queda en casa”, señalaron los organizadores. El total de las entradas, así como de la barra y la comida será donado para las comunidades de la serranía jerezana, siendo este un evento familiar, pero también con causa.