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¿ARMAOS LOS UNOS CONTRA LOS OTROS?

Jaime Santoyo Castro

Los sucesos de Buffalo (diez muertos) y del Colegio de Uvalde en Texas, donde murieron 19 infantes y dos profesoras, desataron en el mundo una gran condena y levantaron nuevamente la polémica en relación al control
en la venta de armas que existe en los Estados Unidos, y de donde salen la mayoría de las armas que existen en el mundo, y en especial en México.
Sin rubor alguno por estos hechos, en Houston Texas, se efectuó la Convención Anual del Rifle apenas tres días después de estos últimos acontecimientos. ¿Qué celebran?


Ahí, el expresidente Trump expresó con mucho énfasis su defensa en favor de la industria armamentista, cuando expresó que “la única forma de detener a un tipo malo con un arma es un tipo bueno con un arma”, expresión que denota una gran insensibilidad y una enorme mentira.
La aspiración de los ciudadanos del mundo es vivir con armonía y en paz, y eso se logra cuando las autoridades orientan el esfuerzo colectivo a trabajar, a producir, a educar, a formar ciudadanos conscientes
de la responsabilidad que conlleva el vivir en sociedad, sin divisiones, sin enfrentamientos, sin desigualdades, estimulando el respeto y el desarrollo del deporte, las artes y la capacidad creadora, y no el encono.


¿Acaso para lograr la paz y la armonía se debe armar a toda la ciudadanía, como plantea Trump? ¿con qué tipo de armas? ¿desde qué edad? Y a los que no tengan para comprarlas ¿él se las va a dar?. ¿Entonces por qué Estados Unidos controla y detiene la carrera armamentista en otros
países y no en el suyo? ¿estará feliz de que el poderío militar de los Rusos esté masacrando a los indefensos ciudadanos de Ucrania?
¿Cree Trump que el estar frente a frente dos personas con armas los hace iguales? Claro que no; la gente buena, para empezar, respeta la vida, la integridad física y el patrimonio de los demás, y espera que los demás también lo hagan, por eso no necesita ni busca tener armas, ni se
capacita en su manejo, ni busca el arma más potente y destructora. Un tipo bueno no tiene la intención de matar o de lesionar a nadie; ¿o acaso la tenencia de arma hace de un tipo bueno un tipo malo?.
¡El derecho individual de tener armas no puede estar por encima del derecho de la sociedad del mundo a tener paz!